Meditación - Sobre abandonar Filosofía

Querido amigo, tú que te planteas si dejar o no la carrera, este escrito va para ti. Puedes tomar cualquier perspectiva - no entraré en clasificar las buenas o malas - y probablemente estarás en pleno derecho de quedarte en ella. Debo tomar partido. Si puedo, en algún modo disuadir de la idea de abandonar la carrera, así lo haré.

Rainer Maria Rilke dijo una vez: “Está usted mirando hacia fuera, y precisamente esto es lo que ahora no debería hacer. Nadie le puede aconsejar ni ayudar. Nadie… No hay más que un solo remedio: adéntrate en sí mismo”. No podría estar más de acuerdo. En la hora más silenciosa de la noche pregúntate a ti mismo: ¿Realmente puedes volver allí fuera y perderte entre la multitud? ¿Puede tu mente deambular en las rutinas monótonas de estos tiempos? Después de probar el fruto prohibido del árbol de la ciencia, ¿podrías abandonar el conocimiento? ¿Deberías dejar Filosofía?

Resulta forzado, soy consciente de que puede parecer eso, el realizar preguntas tan osadas. Admito que adquirirás mucha sabiduría gracias a los libros y textos. Unas letras de tinta y tu soledad te pueden conferir conocimientos que un edificio como la Universidad no puede. La Universidad, en tanto que edificio, no puede otorgar nada. Puede costarte dinero, eso sí. La Universidad, en tanto que lugar de conocimiento, distribución de este y lugar de debates, es el vínculo entre tu persona, la Filosofía y todos nosotros.

La filosofía no consiste sólo en entender el pensamiento y debate de los muertos. La filosofía es un conflicto interno de comprensión global. Todos compartimos sus enigmas, sus miedos y sus intrigas. Puedes combatir estos problemas tú solo, aislado de los demás, o puedes combatir los problemas a nuestro lado. La vida contemplativa es la vida perfecta, pero no es viable.

No defiendo la institución, ni la jerarquía, ni el sistema, ni la evaluación. La Universidad sería, por llamarlo de algún modo, uno de los últimos bastiones de debate filosófico. Último lugar donde iguales, o eso se supone siempre, pueden conversar entre ellos. Una forja de amistades, de pensamientos, de nuevas ideas y proyectos.

Si dejas la Universidad tendrás otros caminos. Podrás asistir a una conferencia, suponiendo que quieras escuchar la voz de un individuo supuestamente formado en aquello que dice, y si tienes suerte podrás formular tímidamente una pregunta. Podrás acudir a un debate abierto, suponiendo siempre que se dan debates respetuosos, e intercambiar información dudosa con otras personas.

Supongo que todo esto no es más que una reflexión que lanzo al aire. Un pensamiento que nació esta mañana, paseando contigo entre las calles de Barcelona, y que ahora he desarrollado tristemente. No supondrá quizás una ayuda, ni conseguirá mantenerte en la ciudad estos 3 años.

Decidas lo que decidas, espero que sigas siendo igual de curioso e inquieto. Devora libros e información, investiga y explora campos desconocidos...

Nos mantendremos en contacto, T.

Comentarios

Entradas populares de este blog

El Tipo, un bar y una calavera tallada

El Tipo en la Ciudad de Bos'on

EL ERMITAÑO - IV - BALAM